CEC 1933, 2303: el amor hacia el prójimo es incompatible con el odio al enemigo
CEC 2262-2267: la prohibición de hacer mal al prójimo, con la excepción de la legítima
defensa
CEC 2842-2845: oración y perdón de los enemigos
CEC 2012-2016: la perfección del Padre celeste nos llama a la santidad
CEC 1265: nos convertimos en templo del Espíritu Santo por medio del Bautismo
CEC 2684: los santos son el templo del Espíritu Santo
TEXTO BIBLICO
TIEMPO DURANTE EL AÑO - "A"
DOMINGO SÉPTIMO
Amarás a tu prójimo como a ti mismo
Lectura del libro del Levítico 19, 1-2. 17-18
El Señor dijo a Moisés:
Habla en estos términos a toda la comunidad de Israel:
Ustedes serán santos, porque Yo, el Señor su Dios, soy santo.
No odiarás a tu hermano en tu corazón; deberás reprenderlo convenientemente, para no cargar con un pecado a causa de él.
No serás vengativo con tus compatriotas ni les guardarás rencor.
Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Yo soy el Señor.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 102, 1-4. 8. 10. 12-13
R. El Señor es bondadoso y compasivo.
Bendice al Señor, alma mía,
que todo mi ser bendiga a su santo Nombre;
bendice al Señor, alma mía,
y nunca olvides sus beneficios. R.
Él perdona todas tus culpas
y cura todas tus dolencias;
rescata tu vida del sepulcro,
te corona de amor y de ternura. R.
El Señor es bondadoso y compasivo,
lento para enojarse y de gran misericordia;
no nos trata según nuestros pecados
ni nos paga conforme a nuestras culpas. R.
Cuanto dista el oriente del occidente,
así aparta de nosotros nuestros pecados.
Como un padre cariñoso con sus hijos,
así es cariñoso el Señor con sus fieles. R.
Todo es de ustedes, pero ustedes son de Cristo
y Cristo es de Dios
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto 3, 16-23
Hermanos:
¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él. Porque el templo de Dios es sagrado, y ustedes son ese templo.
¡Que nadie se engañe! Si alguno de ustedes se tiene por sabio en este mundo, que se haga insensato para ser realmente sabio. Porque la sabiduría de este mundo es locura delante de Dios. En efecto, dice la Escritura: «Él sorprende a los sabios en su propia astucia», y además: «El Señor conoce los razonamientos de los sabios y sabe que son vanos».
En consecuencia, que nadie se gloríe en los hombres, porque todo les pertenece a ustedes: Pablo, Apolo o Cefas, el mundo, la vida, la muerte, el presente o el futuro. Todo es de ustedes, pero ustedes son de Cristo y Cristo es de Dios.
Palabra de Dios.
ALELUIA 1 Jn 2, 5
Aleluia.
En aquél que cumple la palabra de Cristo,
el amor de Dios ha llegado verdaderamente a su plenitud.
Aleluia.
EVANGELIO
Amen a sus enemigos
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 5, 38-48
Jesús, dijo a sus discípulos:
Ustedes han oído que se dijo: «Ojo por ojo y diente por diente». Pero Yo les digo que no hagan frente al que les hace mal: al contrario, si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, preséntale también la otra. Al que quiere hacerte un juicio para quitarte la túnica, déjale también el manto; y si te exige que lo acompañes un kilómetro, camina dos con él.
Da al que te pide, y no le vuelvas la espalda al que quiere pedirte algo prestado.
Ustedes han oído que se dijo: «Amarás a tu prójimo» y odiarás a tu enemigo. Pero Yo les digo: Amen a sus enemigos, rueguen por sus perseguidores; así serán hijos del Padre que está en el cielo, porque Él hace salir el sol sobre malos y buenos y hace caer la lluvia sobre justos e injustos.
Si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen lo mismo los publicanos? Y si saludan solamente a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo los paganos?
Por lo tanto, sean perfectos como es perfecto el Padre que está en el cielo.
Palabra del Señor.
PERMANECEMOS EN EL TEXTO
¿Qué piensa Jesús de la venganza, de devolver un mal con el mismo mal: "ojo por ojo, diente por diente"?
¿Hay que resistir al mal?
¿Hay que combatir el mal?
¿Qué hay que hacer con los enemigos?
¿Por qué hay que amar a los enemigos y rogar por los perseguidores?
CLAVES DE LECTURA
a) Clave de lectura
El 7º domingo Ordinario, desafortunadamente celebrado de tarde en tarde, por cuanto está inserto en el breve período entre el tiempo de Navidad y la Cuaresma, nos enfrenta con uno de los pasajes evangélicos más radicales, provocadores y, al mismo tiempo, consoladores que un cristiano pueda encontrar: las palabras conclusivas de la ‘antítesis’ del discurso de la montaña.
La primera lectura, tomada del Levitico (19,1-2; 17-18), es un texto de la “ley de santidad”. Se remite directamente a la segunda parte del texto evangélico, con el mandamiento de amar “al prójimo” y el estrecho paralelismo con la última frase de las palabras del Señor.
La segunda lectura ( 1 Cor 3, 16-23) nos muestra un posterior desarrollo del tema evangélico: el camino de la santidad cristiana que, en cuanto humanamente paradójico, es difícil de comprender y practicar, es posible por nuestra recíproca pertenencia a Dios, al cual estamos consagrados y que se nos da enteramente en el amor, haciéndonos capaces de amar a los hermanos como Él, a causa de Él y en Él.
El denominado “ discurso de la montaña”, al que pertenece nuestro texto, es el primero de los grandes discursos de Jesús que caracterizan el primer evangelio y comprende los capítulos 5-7. Este largo discurso que se abre con la célebres y siempre provocativas “bienaventuranzas”, puede ser todo él interpretado a la luz de las afirmaciones de Jesús sobre el cumplimiento de la Ley: "No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento” ; "Porque os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos.” (5,17.20). Nuestro texto pertenece a la segunda sesión del discurso, la que expone la “nueva ética” que viene a completar y perfeccionar la que está basada en la ley mosaica y que se caracteriza por afirmaciones que, partiendo de una palabra de la Ley o de un modo de aplicarla, comienzan con la frase “ pero yo os digo” , abriendo la enunciación de una nueva norma ética que no anula la precedente, sino que la reinterpreta a la luz de la interioridad humana habitada e instruida por Dios mismo y por el ejemplo de su comportamiento. De este modo, Jesús se presenta y viene propuesto por el evangelista como un émulo de Moisés, que tiene , cuanto menos, la misma autoridad del gran caudillo hebraico.
Los versos del evangelio de este domingo son justamente los últimos de esta serie y contienen las últimas dos ‘antí-tesis’ o ‘hiper-tesis’ , entre sus estrechas conexiones, e introducen expresiones de una sabiduría moral elevadísima y fundada en una fe en Dios como Padre y Señor omnipotente y misericordioso, de gran pureza y fuerza. A la luz de las otras lecturas de la celebración de este domingo, las radicales exigencias éticas de Jesús que hoy escuchamos se han de ver no como el resultado de un comportamiento heroico, sino más bien como el fruto pleno de una vida cristiana de gran calidad y siempre más plenamente conforme a “la imagen del Hijo” (Rm 8,29).
Fuente: ocarm.org
RECURSO AUDIVISUAL
Mt 5, 38-48. Es fácil odiar. Es fácil dejar de querer, ser irrespetuoso, ejercer la violencia o experimentar venganza. Es fácil ser desigual, injusto y hasta hiriente. Es fácil porque deshumaniza, cosifica. AMAR ES DIFÍCIL. Querer, respetar, valorar. ESO ES DIFÍCIL. Pero cuando lo practicamos juntos, se vuelve sencillo, se vuelve COSTUMBRE. Se vuelve el hábito más bonito de todos. El hábito en el que todos queremos participar. Porque nos hace bien. Nos sienta bien. Nos sentimos bien. AMAR ES DIFÍCIL. Respetar es complicado. Pero qué buen sentimiento genera. En toda la sociedad. PROMOVAMOS LA PAZ.
El Equipo Eucaristía y la Editorial Verbo Divino promueven "Quiero ver": una presentación diferente para cada domingo y festividades del año. https://verbodivino.es/Recursos/Video...
Hacemos silencio.... Nos preguntamos... ¿QUÉ ESPERA EL SEÑOR DE NOSOTROS?
En nuestro ambiente, ¿hay cristianos que tienen enemigos, por ser honestos, por no coimear, por no aceptar sobornos? ¿Hay quienes no consiguen o pierden su trabajo por ser consecuentemente cristianos?
¿Quién es más valiente: el que devuelve golpe por golpe, o el más pacifico?
En este mundo, en el que hay tanta violencia y atropellos, ¿cómo debemos actuar nosotros?
LO QUE NOS ENSEÑA LA IGLESIA (PAPA, OBISPO Y PARROCO) (PENDIENTE DE ACTUALIZACIÓN)